EL TERRENO DONDE CONSTRUIMOS EL MATRIMONIO
Dios es el diseñador de nuestro hogar (matrimonio), y como todo hogar, toda casa, debe ser construida sobre un terreno adecuado, tener unos cimientos sólidos y contar con materiales de calidad, esto es, con fundamentos convenientes y que no se derrumbe cuando lleguen los malos tiempos.
Cuando cada lunes abres la puerta de tu casa para entrar al ambiente de la sociedad y pasas en ella 6, 8 o 12 horas o más, y regresas a tu hogar no podrás evitar estar contaminado con parte de ese ambiente, es decir, parte de la ética, costumbres y estilo de vida de esta sociedad se va a pegar te guste o no. Esto queda definido en Juan17:16 No somos del mundo, ¿cómo es la tierra de esta sociedad? ¿sobre que terreno vamos a edificar nuestro matrimonio?
Cuando Dios no edifica tu casa
Muchos jóvenes no tienen claras sus reglas de vida, o no las han recibido de sus padres, crecen en un contexto donde aprenden a vivir bajo la ley del mínimo esfuerzo y a no respetar reglas, entre otras cosas, porque hemos roto las normas básicas.
Cuidado con el hedonismo, que es una filosofía que está impactando a los matrimonios en esta época, donde la cercanía del regreso de Jesucristo es un hecho. Es una doctrina basada en la búsqueda del placer y a la supresión del dolor y de las angustias como objetivo o razón de ser de la vida.
El principio del placer es un resultado de la vida, pero visto como un beneficio colateral, nunca un objetivo en sí mismo. El placer es un invento de Dios y no del Diablo.
El problema es cuando el carácter hedonista que apela al imperio de los sentidos se eleva al carácter de valor supremo, no sólo contamina el concepto y la práctica de la vida matrimonial y familiar, sino que llega a impregnar también nuestra relación con Dios.
En los últimos años, la modernidad ha llegado a nuestros hogares y ha impactado nuestros matrimonios y nuestros hogares, el 90% del tiempo y energía se dedica al altar laboral, no quedándoles nada más que migajas para sus otras y muy básicas responsabilidades de esposos y padres, esposas y madres. Ocasionando mala o nula comunicación con los miembros de la familia, ocasionando en muchos casos consecuencias desastrosas; en 2010 de los 7317 matrimonios que hubo, existieron 1218 divorcios, es decir el 16.6%; mientras que en 2005 fueron 7550 matrimonios y 842 divorcios, siendo una relación del 11.1%; recuerda lo que dice Gálatas 6:7.
3. La duración
EDIFICANDO LA CASA (EL MATRIMONIO)
Para poder hacer esta edificación, debemos defender el modelo de matrimonio diseñado por Dios, cuyos cimientos tienen tres elementos:
1. La condición
2. La composición3. La duración
1. La condición:
El compromiso entre las dos partes no es la de un contrato que regule los derechos de las partes, es la de un acuerdo que vincula ambas partes en un compromiso de libre aceptación, basados en principios de lealtad, entrega y fidelidad. El matrimonio es incondicional y sancionado por Dios, normalmente en una ceremonia pública que solemniza el nuevo estado civil, comprometiendo a las partes delante de Dios y de los hombres.
2. La composición:
A. Sobre la heterosexualidad la palabra es clara Génesis 2:24, el matrimonio según Dios lo estableció, es un asunto de hombre y mujer, pero antes del matrimonio, y en la propia creación del ser humano la palabra también es clara y excluyente en Génesis 1:27; 5:2.
B. La monogamia es la unión entre un solo hombre y una sola mujer, aunque la poligamia comienza a practicarse desde el principio de la historia de la humanidad, tenemos la primera mención de esta en un descendiente directo de Caín, Lamec leamos Génesis 4:19, a partir de aquí se producirá una distinción entre la línea depravada y la línea escogida, los descendientes de Set, otro de los hijos de Adán y Eva (Génesis 4:26), siempre recuerda Génesis 2:22 y 1a. Timoteo 3:1-7.
3. La duración:
El matrimonio tiene vocación de permanencia, es un compromiso hasta el final. Cuando existe este concepto de entrega total se genera confianza y seguridad y esto produce descanso y tranquilidad del alma, Recordemos Salmo 48:24.
Por lo tanto, la poligamia, el divorcio y la homosexualidad no son fenómenos originarios, sino originados, que aparecen en el tiempo, no como causa de un proceso creador sino como consecuencia del principio de la depravación en el ser humano. De forma que el significado heterosexual, monogámico y permanente de la unión matrimonial no es algo de cada generación nueva, volver a definir libremente basándose en sus inclinaciones personales o en las políticas de turno. El significado exclusivo del matrimonio está definido por Dios y por la naturaleza única y complementaria que dio al hombre y a la mujer.
En la vida necesitamos ideales que perseguir, pues las metas y los objetivos nos retan y motivan a seguir adelante. Cuando hay ideales y sueños que perseguir, estos se constituyen en el motor que provee energía y fuerza para luchar, eso es lo que da sentido a nuestras vidas , pues el ideal de la familia nos instala en 2 de los roles que más nos realizan como seres humanos:
Ser esposo/ esposa y padre/madre
Hoy es el día más extraordinario, porque no lo habíamos vivido, nunca lo viviremos de nuevo, el único día que tenemos es hoy.
Estos temas son muy utilies y sencillos de leer, creo aportan un gran mensaje. En lo personal me han abiertos los ojos en muchos tema, los cuales creo aplican en mi matrimonio. Gracias
ResponderEliminarATTE. Lore
Gracias por tu comentario, esto nos alienta aún más, para seguir trabajando en la obra desde esta trinchera, ojalá pudieras compartirlo con otros matrimonios
EliminarBendiciones para tí, tu esposo y toda tu familia
Excelente y compleja disertación de valores que invitan a la introspección individual, a la auto critica y tan actual el tema, que yo creo que las citas bíblicas, es precisamente lo que hace de este articulo un presente vanguardista y hasta cierto punto atemporal, es obvio que se requiere de un estudio más minucioso por sobre todo para los que desconocemos pasajes bíblicos. Muchas gracias. Atte. Jesús Ponce
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