domingo, 11 de enero de 2015

PRINCIPIO DEL CORAZÓN INFELIZ. EL ORIGEN DE LA DESTRUCCIÓN FINANCIERA

BASE BÍBLICA Jesús también dijo: Un hombre tenía dos hijos; y el menor de ellos dijo a su padre: Padre, dame la parte de los bienes que me corresponde; y les repartió los bienes. No muchos días después, juntándolo todo el hijo menor, se fue lejos a una provincia apartada; y allí desperdició sus bienes viviendo perdidamente. Y cuando todo lo hubo malgastado, vino una gran hambre en aquella provincia, y comenzó a faltarle. Y fue y se arrimó a uno de los ciudadanos de aquella tierra, el cual le envió a su hacienda para que apacentase cerdos. Y deseaba llenar su vientre de las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie le daba. Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre! Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros. Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó. Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo. Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies. Y traed el becerro gordo y matadlo, y comamos y hagamos fiesta; porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse. PRINCIPIO DEL CORAZÓN INFELIZ Es importante resaltar que en la historia, el hijo lo tenía todo: una familia que cuidaba de él, una excelente posición económica, siervos que le obedecían, tenía un buen nombre, etc. EL DINERO Y LA FELICIDAD Siempre tener dinero es más divertido que no tenerlo. Si tienes dinero, puedes construir la casa de tus sueños, puedes tener sirvientes que trabajen para ti, ropa fina, viajes a lugares exóticos del mundo y fiestas regulares con tus amigos. Nunca debemos de confundir diversión con alegría. Alegría, es un estado del alma, es una expresión de la condición de tu corazón, es lo que ha permitido a tantos mártires cristianos entonar canciones a pesar de estar encadenados en lo profundo de una prisión. La alegría no tiene nada que ver con la cantidad de bienes materiales que posees. Tú puedes ser la persona más pobre del mundo y aun así sentir alegría. El sentir alegría es una decisión personal; nadie puede tomar esa decisión por ti; tú puedes decidir hoy mismo ser feliz; quien tiene las llaves de la felicidad en tu vida eres tú; tú eres quien debe decidir, antes de levantarte del lugar donde estás leyendo la computadora, debes decidir que vas a ser feliz con lo que tienes, con las posesiones que tienes, con el trabajo que tienes, con el negocio que tienes, con la vida que tienes, con la relación que tienes, etc. Debes aprender a ser feliz con lo que la vida te ha dado en el presente. Si el año que viene tienes más, ¡pues magnífico!, y si tienes menos. Eso tampoco debe quitarte el gozo de vivir. Aprender a ser feliz y disfrutar de las cosas que poseemos nos permitirá evitar comprar cosas que no necesitamos con dinero que no tenemos, ¡para impresionar a gente que ni siquiera nos cae bien! CONTENTAMIENTO NO ES CONFORMISMO Ninguna persona en el mundo puede llegar a ser realmente rica y exitosa si primero no ha vencido el principio del corazón infeliz, aplicando a su vida el principio del contentamiento. Por esa razón, en el mundo de la política y los negocios existen tantos “ricos pobres” (personas que aparentan tener fortunas pero están profundamente endeudadas) y tantos que, cuando vemos sus vidas, decimos: ¡pobre rico! Estar contentos con nuestra posición en la sociedad no significa que debamos tener una actitud conformista con respecto a ella. El conformista se acomoda a su miseria y se da por vencido frente a la primera señal de oposición o frente a la crisis que se le avecina. Nosotros nunca debemos ser así. Nosotros debemos perseverar hasta triunfar, buscando siempre mejorar el nivel de excelencia con el cual vivimos. Vivir contentos significa aprender a encontrar la felicidad en cada etapa económica de la vida: cuando tenemos poco y cuando tenemos mucho, cuando los tiempos son buenos y cuando son malos, en abundancia y en necesidad; porque, como nos enseñara Saulo de Tarso. “todo lo podemos en Cristo que nos fortalece” LA TAREA MÁS IMPORTANTE DE LA VIDA Debes recordar que la tarea más importante en la vida es, precisamente, vivir y vivir para la gloria de Dios. Debes aprender a vivir y a vivir abundantemente. Para ser feliz a pesar de las circunstancia y aprender a disfrutar de tu vida en forma abundante, debes saber la diferencia entre cosas trascendentes y las intrascendentes. Las cosas trascendentes son las cosas que vivirán más allá de tu propia existencia: tu legado, lo que la vida de tus hijos, el amor, tus relaciones personales, tu relación con Dios… Las cosas intrascendentes son aquellas que no serán relevantes más allá de tu propia existencia: el dinero, tus posesiones, tus estudios, tu posición social, etc. El problema con muchas personas que quieren alcanzar el éxito económico actualmente es que están sacrificando lo trascendente sobre el altar de lo intrascendente. RECOMENDACIÓN Durante esta semana piensa profundamente en las siguientes preguntas y escribe las respuestas en una libreta personal. Lo más importante es que medites en estas enseñanzas, las guardes en tu corazón y las pongas en práctica inmediatamente a la luz de la crisis de valores y económicas que estamos viviendo. LAS PREGUNTAS 1. ¿Qué significa el principio del contentamiento para mí? 2. ¿Cuáles son las áreas en las que estoy demostrando tener un corazón infeliz? 3. ¿He dejado entrar la codicia en mi corazón? 4. ¿Estoy apegado emocionalmente a alguna propiedad material? 5. ¿Seré yo un “rico pobre”, o estoy disfrutando de la vida en abundancia? 6. ¿Cuáles son las cosas trascendentes en mi vida? 7. ¿Cuáles son las intrascendentes? 8. ¿Estoy sacrificando alguna cosa trascendente sobre el altar de lo intrascendente? 9. ¿Cómo puedo aplicar el principio del contentamiento ante la situación financiera que vivo hoy? 10. ¿Cómo voy a reaccionar a las crisis económicas y políticas en el futuro? CÓMO VENCER LA LEY DEL CORAZÓN INFELIZ Escribe, aquí mismo, tu decisión de vencer el principio del corazón infeliz, poniendo en práctica en tu vida el principio del contentamiento. Escribe en tus propias palabras tu compromiso personal a ser feliz en el lugar donde te encuentras económicamente en la vida. Comprométete a disfrutar de los ascensos en tu trabajo, a darle la bienvenida a los aumentos de salario, pero a no perder el sueño de ellos. Decide ser feliz hoy mismo en el lugar, con los recursos y con las relaciones que la vida te ha proporcionado. SI TIENES ALGUNA DUDA, ESCRIBE TU PREGUNTA

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